¡Buenos días!

No sé si debería desearos un feliz inicio de curso o felicitaros el año, porque septiembre es eso: de alguna manera un comienzo que pone fin a una estación, aunque aún nos queden unos días de verano, y la afirmación de que un curso y nuevas aventuras empiezan. 

Mi vuelta a la realidad después de unos días de paréntesis ha sido lenta. Me costó muchísimo parar en agosto y se me hizo muy cuesta arriba el cierre por todo en general. El curso pasado fue muy intenso, lleno de cosas bonitas y también de retos a los que tuve que enfrentarme, muchos de ellos con miedo por lo desconocido y lo difícil de lidiar con algunas cosas que escapaban de mis manos. Ha sido un aprendizaje brutal y que he conseguido asimilar en los días de vacaciones.  

Como te contaba, mi vuelta ha sido muy lenta, no quería empezar como terminé. Así que me lo tomé con mucha calma. Tenía un calendario con fechas muy bien fijadas para conseguir esto que me había propuesto. Y creo que es de las primeras veces que lo he cumplido. 

Lo primero fue prometerme que las mañanas las dedicaría a trabajar y las tardes me las tomaría libres, para estar con los niños y disfrutando un poquito más del verano. En esas tardes de verano, en la hora de la siesta, encontré el momento perfecto para volver a dibujar. Para mí, dibujar es un lugar seguro, una forma de desconectar y de parar la cabeza. 

De esos ratitos han ido saliendo los primeros bocetos para un nuevo proyecto en el que estoy trabajando. Ya sabéis que me encanta ir compartiendo los procesos creativos. Para mí, es como desnudarme delante de mucha gente, pero también es una forma de haceros partícipes de lo que voy haciendo cada día, de esa parte que queda para mí y que solamente ve la luz cuando lo presentamos de manera oficial.  

Aparte de Instagram, el blog se convertirá en este nuevo curso en una forma más de acercarme a vosotrxs, de abriros las puertas de mi pequeño estudio y de que estemos un poquito más en contacto. Es uno de los objetivos que he grabado a fuego en mi bullet journal, en el que acabo de estrenar con la llegada de septiembre. 
Esto es lo que puedo contarte por hoy. Espero que me acompañes también por esta pequeña ventanita. Se me antoja como un lugar perfecto para poder daros más información sobre materiales, procesos creativos, de trabajo, técnicas... Espero que tu vuelta sea lo más llevadera posible y que podamos seguir compartiendo ratitos de creatividad que llenen nuestro día a día de cosas bonitas. 

¡Feliz comienzo, feliz septiembre!